Aún hoy, muchos pacientes llegan al dentista con la idea de que los tratamientos serán largos, dolorosos o incómodos. Pero la odontología actual ha cambiado de forma radical. Gracias a las técnicas mínimamente invasivas, hoy es posible tratar la boca de manera más respetuosa, preservando al máximo los tejidos sanos y ofreciendo una experiencia mucho más cómoda y predecible.
Este enfoque se basa en tres pilares fundamentales. El primero es la prevención y el diagnóstico temprano. Detectar los problemas cuando aún son pequeños permite solucionarlos con procedimientos sencillos, menos agresivos y más conservadores. Por eso, las revisiones periódicas, la higiene profesional y los protocolos preventivos se han convertido en herramientas esenciales para mantener una boca sana y evitar complicaciones futuras.
El segundo pilar es la tecnología digital, que ha revolucionado por completo nuestra forma de trabajar. La radiología 3D (CBCT), junto con los escáneres intraorales y la planificación digital, nos permite ver la anatomía dental con precisión milimétrica y anticiparnos a cualquier detalle. Esto significa tratamientos más seguros, diagnósticos más fiables y una disminución notable del riesgo de molestias o complicaciones. En pocas palabras: intervenir justo donde hace falta, y nada más.
El tercer pilar lo forman los materiales modernos, diseñados para integrarse de manera natural con el diente. Hoy contamos con productos más resistentes, estéticos y biocompatibles, capaces incluso de interactuar con el medio oral. Permiten retirar únicamente la caries estrictamente necesaria, preservar estructura dental y proteger el nervio cuando el diente está debilitado. Además, los materiales biomiméticos imitan el comportamiento del diente original, ofreciendo restauraciones duraderas sin necesidad de desgastar más de lo imprescindible.
El resultado de esta combinación es una odontología más humana, más precisa y mucho más cómoda para el paciente. En ámbitos como implantes, estética u ortodoncia, las técnicas mínimamente invasivas permiten tratamientos más rápidos, menos traumáticos y con resultados más naturales.
En nuestra clínica en Maó trabajamos cada día con esta filosofía, para que cada paciente sienta que viene a cuidarse. La odontología ha evolucionado, y hoy podemos tratar cada sonrisa con suavidad, precisión y verdadero respeto.
Directora de la Clínica Dental Martí Ainsa
Artículo publicado por la Dra. Ana Martí en la revista UTIL de Diciembre 2025: Odontología mínimamente invasiva